CURVA-S PROGRAMADA
Sabemos que toda obra se inicia desde la
formulación del presupuesto, plasmado en un metrado con los volúmenes de obra a
ejecutar, los cuales al ser multiplicados por sus respectivos precios unitarios
y sumados dan el costo directo de la obra.
Programando este metrado en los meses de
duración de la obra, se obtiene el consolidado de recursos, el cronograma
valorizado y la Curva “S” Programada.
CURVA-S VALORIZADA O DE VALOR GANADO
Es en base a este metrado contractual,
se lleva el control de las valorizaciones mensuales, obteniendo el consolidado
de recursos que a la fecha se debieron emplear en la obra, el cual se puede
comparar con los materiales empleados realmente en la obra.
Cuando valorizamos la obra en función a
los avances ejecutados a precios del presupuesto base, se obtendrá la Curva ”S”
a precios base, o también llamada Curva-“S” de Valor Ganado.
Hasta este punto la programación y las
valorizaciones responden a una mecánica sencilla, el problema se da cuando se
quiere controlar económicamente la obra en base al metrado contractual, ya que
se requiere de mucho esfuerzo para controlar la obra por cada una de las
partidas del metrado.
Para simplificar el control económico de
la obra, se debe fasear la obra conformando fases o partidas de control, que
vienen a ser el agrupamiento de partidas por características similares, las
cuales tendrán un análisis ponderado que serán la referencia para el control de
la obra.
Por lo tanto en vez de controlar unas
200 partidas del metrado, solo se controlarán 20 fases de control, las que
responderán a la programación anteriormente efectuada.
CURVA-S REALIZADA
Para llevar a cabo el control económico
de la obra se requerirá controlar los materiales, la mano de obra, los equipos
y los sub-contratos.
El control de los materiales se efectúa
en base a un kardex promedio ponderado, en el cual los materiales ingresan al
almacén de la obra y se distribuyen en cada una de las fases de control. Por
otro lado la mano de obra, los equipos y los sub-contratos se asignan
mensualmente a cada una de las fases.
Es en base a este control de costos de materiales,
mano de obra, equipos y sub-contratos, y en función a las partidas de control,
se obtiene la Curva-“S” Real de la obra.
Como el control se ha efectuado por cada
fase, se tendrá por cada una de las fases los costos programados, los costos
reales y los costos de valor ganado; lo que nos lleva a obtener los índices de
rendimiento SPI (plazo), CPI (costo) y SCI (productividad), como también las
variaciones o desviaciones SV% (plazo) y CV% ( costo).
Por último comparando los gastos
generales programados versus los gastos generales de obra, en función a los
centros de control de los gastos generales, se obtendrá mes a mes el margen de
utilidad.